La combinación todo un acierto, ya que estas albóndigas tienen una textura crujiente y con el calor y humedad de la crema se mantienen perfectas, sin romperse. A mi personalmente me gustaron más así que con tomate porque adsorben la propia crema y acaban siendo un bocado delicioso.
Le añadí pasta para que fuera un plato más completo y con más consistencia pero lo mismo se puede tomar sola.
De la elaboración de esta crema también ha salido un puré, así que os podéis hacer un 2 en 1 y tener primer plato para un par de días. No saqué foto del puré, pero vamos, os podéis hacéis a la idea... a mi me recordaba a los que me daba mi madre de pequeña.
No me entretengo más, estos son los pasos a seguir. . . .

- Calabaza (500 gr.)
- 7 zanahorias
- 1 ajo
- 1 cebolla
- 1 patata
- 4 hojas de acelga
- 1 puerro
- 2 cucharadas rasas de miso (podéis sustituirlo por una pastilla de caldo de verduras. Aquí _ os dejo propiedades para los que no sabéis lo que es)
- 1 vaso y 1/2 de macarrones
- Semillas de sésamo
- Alga Arame ( Aquí _ os adjunto su propiedades y beneficios)