Ayer colgué en Facebook una hoja del libro que estoy leyendo sobre Nutrición, que vi imprescindible mostraros. Era toda una valiosa información. Para quien no tenga Facebook y no lo viera, el libro se llama “Coaching Nutricional para flexivegetarianos, vegetarianos y crudiveganos”, escrito por Ana Moreno. (Aconsejable para todas las personas, no solo si te encuentras dentro de estos 3 “grupos”)
Como he dado con este libro?
La semana pasada “preocupada” por la relación que estaba comenzando a establecer últimamente con la comida, bien sabiendo que la puerta del armario de la comida se abría más veces de lo normal…. además más por hambre emocional que por hambre físico, real, producido por el “estrés” que a veces supone esta maravillosa caótica vivencia de ser madre, me hacían acudir al armario (mi herbolario, como le llama David) más de lo debido.
A pesar de no haber alimentos “poco saludables” en él, comía lo que pillaba, una galleta, una ciruela, unas almendras, alguna onza de chocolate negro 100% (del bueno, por lo menos..), algunas veces dependiendo si ha costado más o menos dormirle, más de las debidas… ejem, y otra cosa que no entiendo, no sé si os pasa… cuando tengo “necesidad” de comer algo (dulce preferiblemente) aun sabiendo que no tengo nada en el armario… lo abro abro y a continuación cierro para corroborar por 5º vez que finalmente no compré la tableta con almendras! (Que a veces sí que está, no os penséis) No sea que, por si acaso, como por arte de magia resulte que la compré y no la he visto. Es como Hola armario!! Adiós armario!! En fin.
Consciente de que no estaba haciendo bien las cosas y escuchando a mi cuerpo que me decía… “Eh! Para ya!! Que me siento saturado!! Pero… dame un poquito más anda…” Incoherencia total.
Me puse a buscar en google, “Como eliminar ansiedad por comer” y ta chan… me salen varias opciones entre ellas unas cuantas de Ana Moreno, de quien ya había visto en alguna ocasión alguna conferencia en You Tube.
Finalmente dí con este libro y desde que leí la primera página pongo en práctica todo lo que dice, y estoy ENCANTADA. Llevo días comiendo limpio, 5 comidas al día, sin saltarme ninguna, alimentos vivos que sumen y no resten energía a mi cuerpo, y otros por otro lado realizando los ejercicios que menciona en su libro, esto ya trabajo con uno mismo.
Si algún@ os sentís identificados y os pasa… merece la pena comprar este libro.
Siguiendo estos patrones, hace un par de días preparé estas hamburguesas vegetales, que con una y un poquito de verde para darle alegría al cuerpo, plato 10. La he llamado Hamburguesa Pinta porque su alimento principal es la alubia pinta. Mirad que sencillas son de preparar, espero que os gusten.
- 6 Puñados de alubias pintas (o rojas)
- 1 Tira de Alga Kombu
- ½ Vaso de arroz integral
- 1 Pimiento verde
- ½ Pimiento rojo
- 1 Puerro
- 1 Cucharadita rasa de ajo en polvo
- 2 Cucharadas de harina de garbanzo
- 2 Cucharadas de pan rallado
- Sal
ELABORACIÓN
Por un lado vamos a poner las alubias en la olla expres, previo remojo de 8 horas, añadimos la tira de Alga Kombu, para así aportarle minerales a la cocción, y también añadiremos el arroz integral, al que antes le habremos pegado un lavado en un colador grande. Cocinaremos durante 25 minutos desde que empiece a salir el aire.
Mientras lavamos los pimientos y el puerro y los cortamos en trocitos menudos para a continuación sofreír con una pizca de sal. Escurrimos bien el arroz y las alubias para asegurarnos de que no quede nada de agua tras su cocción y comenzamos a aplastarlas con un tenedor o mortero, hasta obtener más o menos la consistencia de una pasta. Que no queden las alubias enteras (no utilicéis batidora! Que si no os sale un puré y no queremos eso).
Tras este paso añadimos la sal, el ajo en polvo, la harina de garbanzo, el pan rallado y el sofrito (podéis añadir también la tira de alga Kombu picándola con una tijera).
Mezclamos muy bien, probamos. Corregir de sal si lo veis necesario, pero siempre cuidado con la sal, cuanta menos mejor para nosotr@s. Cogéis la mezcla, hacéis una bola con las manos que prensareis para endurecerla y hacéis la forma de una hamburguesa aplastando con las manos y redondeando el borde con la palma. En una sartén con un poco de aceite (un chorrito), doráis por ambos lados.
* Si queréis darle un toque más crujiente podéis pasarla antes de dorarla en la sartén por pan rallado un poco más grueso del que hemos utilizado.
Y listo!